P. Heribert Graab S.J.



Escenas de un pesebre de Pasión y de Pascua 
de la iglesia de los jesuitas de Sankt Michael, Göttingen – 
como impulsos espirituales para el tiempo pascual 











  Además:

  *
Belén para Adviento
    y Navidad

  * Belén para algunos
    Evangelios del año

 











Introducción

Creer viene de oír. Pero “oír” es más que la percepción del mensaje por el oído y la cabeza. El Evangelio de Jesucristo quiere ser acogido con todos los sentidos y no en último lugar con el “corazón”. Hubo en el cristianismo continuamente reediciones del antiguo iconoclasmo; pero imagen, escena e interpretación son desde siempre medio para el anuncio en la Iglesia católica.

¿Sabían ustedes que la palabra “pesebre” ya hace mucho tiempo no es sinónimo de “pesebre navideño”? Originalmente esto era cierto; pero con el transcurso del tiempo se ha entendido por “pesebre” toda representación escénica de los relatos bíblicos.  Por eso hay, en algunas iglesias del sur de Alemania, pesebres todo el año, que, domingo tras domingo, representan el correspondiente Evangelio (del orden de Lectura preconciliar) en escenas a veces bastante lujosas. Determinadas escenas –sobre todo los relatos de la Pasión– se hallan en o también delante de muchas iglesias con representaciones figuradas de un modo semejante al de los pesebres: Así, por ejemplo, la escena del Monte de los Olivos, con los discípulos dormidos, el grupo de la Crucifixión con María y Juan y con frecuencia también otros participantes (sobre todo María de Magdala), el entierro y el lamento por Jesús, las escenas de la Resurrección de la mañana de Pascua…

En algunas regiones (por ejemplo en la antigua Silesia o también en el sur de Alemania) había y hay la costumbre de visitar en las iglesias desde el Viernes Santo hasta Pascua, la “Santa Tumba” y allí orar. También la Santa Tumba es una escena figurada, en cuyo centro yace el cadáver de Jesús, frecuentemente adornado con flores y luces funerarias. En tiempos antiguos fue adorado también en la Santa Tumba, el Sacramento del Altar en una custodia velada. La velación insinuaba, que ya en la muerte de Jesucristo está velado el misterio de la mañana pascual. En consecuencia, en las devociones populares pascuales, fue descubierta la custodia, Él vive.

Considerado por sí solo, el relato de la Pasión nos precipitaría en una abismal desesperación, no habría aquí la clara luz de la mañana de Pascua y el alegre mensaje de la Resurrección de Jesús. Los relatos de Pasión y Pascua juntos forman el núcleo de la fe cristiana: El “misterio pascual”. Por este motivo siguen a las escenas del pesebre del relato de Pasión, las escenas del acontecimiento pascual.

Estas representaciones escénicas hablan a las personas también hoy y pueden acercarles las tradiciones bíblicas. La “narrativa”, una teología que se relata, se ha descubierto de nuevo en nuestra época. Y de teología narrativa se trata también en los “pesebres”, que nos comunican la comprensión de los fondos y conexiones teológicas y pueden contribuir a una comprensión más profunda de nuestra fe. En la representación de las escenas del pesebre, por consiguiente, se trata -como en los relatos bíblicos- no de exactitud histórica sino de anuncio teológico. También se trata siempre de las personas que contemplan el pesebre con devoción y que se deben reconocer y entender en el acontecimiento del pesebre como personas actuantes ellas mismas.

Las escenas aquí representadas de un “pesebre de Pasión y de Pascua” fueron concebidas para la Iglesia de Sankt Michael de Göttingen y configuradas por Waltraud y Markus Eidt, Sylvio Krüger y Heribert Graab. Tomémonos un poco de tiempo para la contemplación de las imágenes y para una lectura meditativa de los textos.
P. Heribert Graab S.J
en nombre de todo el equipo