Verkündigungsrelief
am Nordportal der Würzburger Marienkapelle





Marienkapelle Würzburg
Tympanon des Nordportals, 15. Jahrh.

Schmunzeln- und nachdenken

 Auf den ersten Blick sieht alles ganz traditionell aus: Der Erzengel Gabriel mit dem Spruchband „Ave Maria, gratia plena, dominus tecum" - „Gegrüßet seist Du, Maria, voll der Gnade, der Herr ist mit Dir!" Ihm gegenüber die kniende Maria mit einem Buch in der Hand. Darüber Gottvater mit der Weltkugel in der Hand und umgeben von zwei kleineren Engeln, die den Vorhang halten, vor dem sich die Szene abspielt.

Wer die Verkündigungsdarstellung am Nordportal der Würzburger Marienkapelle allerdings genauer anschaut, muss zunächst einmal schmunzeln: Man kann eine Verbindung zwischen dem Mund von Gottvater und dem Ohr Marias entdecken - sie sieht aus wie ein Rohr oder ein Schlauch. Wenn man sich den Anfang dieses Rohres bei Gott denkt, wird es zum Sprach-Rohr: Die Botschaft des Engels ist nichts anderes als das Wort Gottes, das über ein Sprachrohr von seinem Mund direkt ins Ohr Marias gelangt - ein Wort, das nur für sie bestimmt ist.


Wenn man den Anfang des Rohres bei Maria sieht, wird es zum Hör-Rohr: Sie lässt sich den Ruf Gottes ins Ohr, unter die Haut, zu Herzen gehen. Sie hört, horcht und gehorcht: „Mir geschehe nach deinem Wort". Wer bei diesem Anblick neugierig geworden ist, wird noch ein weiteres köstliches Detail erkennen: Das Sprachrohr, das Hörrohr oder der Schlauch wird plötzlich zur Rutschbahn. Über dem Haupt Marias sieht man das Jesuskind, das fleischgewordene Wort Gottes, bäuchlings - mit Armen und Kopf voraus - heruntergleiten und auf Maria zu-rutschen.

Ein Bild zum Schmunzeln, aber mit ,Tief-Gang' im wahrsten Sinn des Wortes. Eine für manche vielleicht naive, aber doch sehr originelle Darstellung dessen, was wir am Fest ‚Verkündigung des Herrn’ feiern: Gott hat einen Menschen gefunden, bei dem er mit seinem Wort ,landen' und ankommen konnte, der ganz Ohr war für seinen Anruf.

Aber dieses Relief enthält weit mehr: Ein Drei-Punkte-Programm für unser Christsein, spirituelle Impulse, die uns gerade in dieser Fastenzeit tiefer in unseren Glauben hineinführen könnten. Zum einen: Suche die Orte auf, an denen ,Rutsch-Gefahr' besteht - an denen das Wort Gottes in dich hineingleiten und einsickern kann. Feiere die Gottesdienste mit, in denen Gott über die Texte der Heiligen Schrift, über die Musik, über Symbole und Gesten einen Zugang zu dir finden will. Nimm dir Zeit für die private Bibellektüre und für das Gespräch über Glaubensfragen. Und versuche, in den oft stummen Bitten deiner Mitmenschen den Anspruch Gottes an dich herauszuhören. Zum anderen: Entdecke die ,Rohr-Post', die Gott speziell für dich auf den Weg gebracht hat - das Wort, das dir ganz persönlich gilt. Finde heraus, wozu er gerade dich ruft; wie gerade du mit deinen Begabungen die Welt eine Spur menschlicher machen kannst.

Und schließlich: Lass dieses Wort zum ,Ohr-Wurm' werden - zur Melodie, die dir immer wieder durch den Kopf geht. Spiele dein Lebensthema in den verschiedensten Variationen durch. Ich möchte mit diesem erheiternden, aber auch zum Nachdenken anregenden Verkündigungsbild in die Fastenzeit hineingehen. Ich will versuchen, mir - wie Maria damals - das Wort Gottes ins Ohr gehen zu lassen. Und ich hoffe, nicht auf dem Schlauch zu stehen, wenn dieses befreiende und ermutigende Wort mir ganz tief ins Herz rutschen will...

Wolfgang Raible in: Anzeiger für die Seelsorge
Zeitschrift für Pastoral und Gemeindepraxis
3 / 2009


Relieve de l'Anunciación
en el portal norte de la Marienkapelle de Würzburg



Sonreír y Reflexionar

A primera vista parece todo muy tradicional: El arcángel Gabriel con la cartela “Ave Maria, gratia plena, dominus tecum” – “¡Dios te salve María, llena eres de gracia, el Señor está contigo!”. Frente a él, María está arrodillada con un libro en la mano. Encima, Dios Padre con la bola del mundo en la mano y rodeado de dos ángeles más pequeños, que sostienen la cortina delante de la cual sucede la escena.

Pero quien mire con más exactitud la representación de la Anunciación en el portal norte de la Marienkapelle de Würzburg, tiene que sonreír en primer lugar: Se puede descubrir una conexión entre la boca del Dios Padre y la oreja de María –
parece como un tubo o una manguera. Si se piensa en el comienzo de ese tubo en Dios, se convierte en tubo acústico: el mensaje del ángel no es otra cosa que la Palabra de Dios, que va por un tubo acústico desde su boca directamente a la oreja de María, una palabra que sólo está determinada para ella.


Si se ve el comienzo del tubo en María, se convierte en una trompetilla acústica: permite que la llamada de Dios en la oreja, entre de la piel, vaya al corazón. Ella oye, escucha y obedece: “Hágase en mí según tu Palabra”. Quien se haya sentido curioso ante esta imagen, reconocerá aún otro detalle exquisito. El tubo acústico, trompetilla o manguera, se convierte de repente en tobogán. Sobre el tubo se ve a Jesús Niño, la Palabra de Dios encarnada, boca abajo –con los brazos y la cabeza por delante – resbalar y deslizarse hacia María.

Una imagen para sonreír, pero con “calado” en el más puro sentido de la palabra. Una representación quizás naiv para algunos, pero una representación muy original de lo que celebramos en la fiesta de la “Anunciación del Señor”: Dios ha encontrado a un ser humano, en el que -Él con su Palabra puede “aterrizar” y ser acogido, un ser humano que es todo oídos para su llamamiento.

Pero este relieve contiene mucho más: Un programa en tres puntos para nuestro ser cristiano, impulsos espirituales, que a nosotros ciertamente en esta Cuaresma pudieran conducirnos más profundamente en nuestra fe. Por una parte: busca los lugares, en los que existe “peligro de deslizamiento” – en los que la palabra de Dios en ti pueda deslizarse internamente e infiltrarse. Celebra los servicios religiosos en los que Dios por los textos de la Sagrada Escritura, por la música, por los símbolos y por los gestos quiere hallar un acceso hacia ti. Tómate tiempo para la lectura en privado de la Biblia y para el diálogo sobre las cuestiones de fe. E intenta en los ruegos, con frecuencia, mudos de tus prójimos escuchar la pretensión de Dios para ti. Por otra parte: Descubre el “tubo-postal” que Dios ha puesto especialmente para ti en el camino –la Palabra que es personalmente válida para ti. Descubre dónde Él ciertamente te llama; cómo puedes con tus talentos hacer el mundo un poco más humano.

Y finalmente: Deja que esta Palabra se convierta en “música pegadiza”, en melodía que continuamente te haga reflexionar. Repasa tu tema existencial en diferentes variaciones. Yo quisiera con esta entretenida imagen de la Anunciación, pero que también ayuda a la reflexión, entrar en Cuaresma. Yo quiero intentar permitir que la Palabra de Dios entre por mi oído, como entonces hizo María, y espero no estar sobre el tubo si esta Palabra liberadora y alentadora quiere deslizarse profundamente en mi corazón.

Wolfgang Raible en Anzeiger für die Seelsorge
Revista para Pastoral y Praxis Comunitaria
3/2009